La sexta Marcha Anual de las Putas en Queens, NY es una denuncia pública de todas las formas de violencia sufridas porTranslatinx, Trans-Black, Transgéneroy género expansivo Sex trabajadores de color, así como  las estructuras sociales e institucionales que refuerzan esa violencia. Condenar esta violencia es urgente, porque la violencia contra nuestras comunidades a menudo es justificada y normalizada por nuestra sociedad, perpetuando una cultura que apoya la opresión de las trabajadoras sexuales transgénero de color en público y en privado.

 

La violencia y persecución experimentada por las trabajadoras sexuales transgénero de color incluye cualquier acción que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual, psicológico y/o simbólico.

 

SlutWalk Queens es una acción política que exige el reconocimiento de nuestros derechos como personas translatinas, personas transnegras y personas transgénero de color. Las trabajadoras sexuales exigimos cambios inmediatos a este sistema de opresión, machismo y patriarcado que invisibiliza nuestra existencia y amenaza nuestros derechos y nuestra autonomía corporal.

 

Somos juzgadas por ser trabajadoras sexuales, somos condenadas por tomar nuestras propias decisiones sobre nuestros cuerpos e identidades, y muchas veces somos asesinadas.

 

En Nueva York, te llaman puta cuando te vistes de cierta manera, eres puta cuando hablas de cierta manera, eres puta cuando te decides y eres puta cuando no haces lo que haces. ; la sociedad "quiere" que hagas.

 

ComoTrabajadoras sexuales de color translatinx, transnegras, transgénero y de género expansivo, llevamos una pesada carga social y vivimos en un sistema donde nuestros agresores escapan al castigo y su violencia es justificada por la sociedad. 

 

El Slutwalk tiene un objetivo claro. No se trata solo de defender los derechos de las trabajadoras sexuales, sino que también es una manifestación pública que reivindica la etiqueta de “puta” y el comercio de trabajadoras sexuales para empoderar a las trabajadoras sexuales trans de color para que puedan tomar decisiones libres sobre sus cuerpos. Nos vestimos como queremos, bailamos con quien queremos, actuamos como queremos y trabajamos en lo que queremos trabajar.

 

No queremos seguir experimentando la discriminación, exclusión y opresión que históricamente ha sido armada contra nosotros por la sociedad. 

 

El sistema nos castiga por tener el coraje de decidir sobre nuestro cuerpo y nuestra vida. Nos castigas por no ser sumisas, por ser trans feministas y feministas, por ser independientes, por disfrutar de nuestra sexualidad, por estar en la discoteca bailando y divirtiéndonos, por vestirnos como queremos, y por andar por las calles… matas nosotros por ser libres.

 

Con esta marcha, reivindicamos la palabra "puta" y rechazamos toda forma de  violencia que se ejerce contra nosotros en base a nuestras actitudes, apariencias y comportamiento. Ninguna persona debe ser violada jamás. "No significa no."